Luxury. Traducido al español significa lujo.

 

El diseño de interiores luxury, un estilo donde el lujo es el actor principal.

 

Todo se combina para generar un ambiente lujoso y exclusivo. Sitios señoriales, de grandes dimensiones.

 

Chimeneas, molduras, acabados de gran elegancia. Materiales nobles. Sedas, mármoles, piedras naturales de gran brillo.

 

Mucha luz natural entrando por los ventanales. Reflejos, destellos de cristales, espejos. Conexión con el interior y el exterior manteniendo el mismo nivel de boato y esplendor.

 

Y los muebles, que ocupan un lugar destacado en este estilo.

 

El mobiliario “joya”. Piezas artesanales y únicas. Con acabados y materiales de primera calidad.

 

Pareciera que, si no están todos los materiales más nobles combinados en este diseño interior, algo está faltando. Está incompleto.

 

Los muebles, accesorios y objetos del estilo luxury son una inversión para un largo tiempo. Aquellos que están dispuestos a pagar el valor de esas piezas exclusivas saben que pueden desaparecer del mercado, y los coleccionistas privados buscan ávidamente esas obras de arte.

 

Maderas preciosas, latón brillante y serigrafías sobre madera lacada forman una combinación de gran riqueza.

 

Aquellos que optan por el estilo luxury, aman lo exuberante y ostentoso. Y buscan artesanías exclusivas para dar a sus ambientes ese clima de lujo que desean.

 

Los cabeceros de cama, los sillones, los estampados de seda, los colores y la mezcla de texturas suaves y con reminiscencias de arte clásico, se combinan con las luminarias de estilo Versalles y los espejos de estilo barroco.

 

Equilibrio y mucho cuidado en no recargar excesivamente los espacios, son elementos fundamentales del estilo luxury.

 

Y la decoración de las paredes, está en perfecta armonía con los materiales utilizados. Sedas, colores en combinación con los tapizados del mobiliario, todos los elementos murales aportan ese impacto visual y lujoso que buscamos en cada habitación.